Foto: Emilio Naranjo/EFE
Mariano Rajoy y sus allegados han pactado hoy no dar a conocer los mayores ajustes y recortes a aplicar hasta el 31 de Marzo, fecha en la que se aprobará un decreto ley con el que aprobar los presupuestos de 2012. Será pues con los presupuestos, y no antes cuando algunas de las medidas más duras sean dadas a conocer.
La elección de la fecha no tiene desperdicio, el 31 de Marzo, y todo tiene un por qué, justo unos días antes, el 25 de Marzo se celebran las elecciones Andaluzas donde Arenas se juega una victoria histórica para el PP en feudo socialista. Ahora bien, ¿y el interés general del País? ¿y las prisas para el cambio de gobierno y así acelerar la implantación de ajustes? El PP se desdice en sus prisas, en su emergencia nacional para aplicar de inmediato sus recortes en vistas a unas autonómicas, lo que evidencia la sed de poder por encima de los intereses generales de un país que necesita medidas y unos presupuestos generales que ahora no existen, sino que están prorrogados.
La pregunta ahora también es otra muy obvia, ¿cómo de duros serán los recortes para incluso aguantar, casi 3 meses, sin aprobar los presupuestos a sabiendas de que en caso de descubrirlos perderían una comunidad que ahora mismo tienen ganada en intención de voto?
Rajoy primero ganó las elecciones generales sin dar a conocer su programa y sus recortes, ahora quiere aguantar el tirón para ganar también unas autonómicas, todo a costa de un país resignado, en plena crisis y a la deriva.