Mucho se habla, se comenta y debate sobre consenso de mínimos entre las acampadas, pero cada vez más crece la sensación de que se pierde la noción de ver claramente lo que es prioritario, básico y compartido por la mayoría, de lo que es secundario, complementario y secundado por minorías.
Se trata pues de una cuestión de prioridades por las cuales el movimiento 15m representa a un gran espectro de población, distingo claramente entre movimiento y acampadas, el movimiento es más amplio. Dicha representación, venía sustentada en algo muy básico, que desde principios de esta democracia que tenemos, partidos minoritarios han denunciado, una reforma de la ley electoral. No digo que las otras 3 o 4 propuestas en consenso de mínimos no sean importantes, que lo son, pero no lo son tanto, por varios motivos.
Nuestra democracia se sustenta como otras en la representatividad que los partidos políticos hacen de los ciudadanos, son estas organizaciones políticas las que en virtud del voto ciudadano ejercen el poder político, son básicamente la representación de los ciudadanos. Si ese es el sistema por el cual los ciudadanos podemos cambiar, reformar nuestro país, ¿por qué no creer que es la mejor forma de llevar a cabo nuestras reclamaciones?. Pues básicamente por la mala distribución del voto. No es lógico que IU en el congreso tenga sólo un diputado en el congreso cuando es la tercera fuerza política del país. Tampoco es justo el reparto que se hace de votos entre los partidos políticos más votados. Por todo esto, es imprescindible no perder de vista que la prioridad es un cambio de la ley electoral, de ese modo se puede tener más representatividad, se podrían llevar a cabo otras políticas y los partidos nacionalistas no tendrían el peso que siempre han tenido en el conjunto de las políticas nacionales.
Puede que se quiera abarcar más de lo que se puede, muchos de los que secundan las acampadas piden consensos más propios de partidos políticos que de una amplía mayoría de ciudadanos que puedan secundar. Es cuestión de prioridades conseguir tener de éxito, o morir de éxito.