Austericidio, la interiorización de una forma de vida

austericidio

Crisis, crisis, más crisis. Lo tenemos tan asumido que se nos escapan de forma natural coletillas como «con la que está cayendo», vivimos en un mundo al que todo le afecta esta crisis, con matices siempre, pero irremediablemente afectado en casi cualquier contexto, acto o decisión que nos rodea, es inevitable escapar de ella.

Como en matrix, teníamos dos pastillas a elegir. Una la que nos mostraría la realidad y nos haría a corto plazo todo mucho más duro, pero que sin embargo nos llevaría a enfrentarnos contra el poder establecido, los errores cometidos y la construcción de una nueva sociedad limpia de quienes nos llevaron a esto. La otra pastilla es la del austericidio que nos condena a seguir aguantando el chaparrón, a seguir confiando en que quienes nos metieron en esto nos sacarán, precisamente con la receta de la austeridad, la de no gastar en nada. Por todos es sabido que elegimos la segunda, no ahora con la crisis, hace ya mucho tiempo.

No gastar

Es la fórmula de la austeridad para salvaguardar las cuentas como país, es la excusa, la salida dicen políticos, lobbies, economistas, grandes empresarios, mercados, banqueros etc. No se trata sólo de la implantación de medidas que afectan a la economía de un país, se trata de medidas que van minando las vidas de las personas. Es en realidad la fórmula para que las personas de a pie, quizás como tú o yo, no podamos gastar en comida que poder echarnos a la boca, también para pagar una hipóteca o un alquiler donde poder vivir bajo un techo, eso a lo que supuestamente una constitución, que ni tú (quizás) ni yo hemos votado, asegura que tenemos derecho.

Por el camino ha calado el mensaje machacón para llevarnos al austericidio, por ejemplo si no tienes trabajo es por qué no eres emprendedor, si, y si piensas que eso no es austeridad ¿cuánto crees que ahorra el gobierno en subsidios por largarte del paro a buscarte la vida como puedas? eso sí, tirando del dinero de gente cercana para montarte algo por tu cuenta, olvídate de créditos u otros.   Pero no es esa la única austeridad que se logra sacando a la gente del paro, también con movilidad exterior, como diría Bañez, el modo de sobrevivir es marchando al extranjero y de paso ser una carga menos para tu país, allá te las apañes. Vistas las opciones mayoritarías estás condenado quieras o no a asumir esto para poder trabajar si estás en el paro.

Con la interiorización pasado el tiempo te acostumbras

Te das cuenta un buen día que lo normal ya no es que te compres ropa cada temporada, no es que salgas de vez en cuando, no es que llegues a fin de mes, no es que tengas un frigorífico lleno con comida (siempre en los mejores casos) . Lo normal ya es lo que antes era anormal. Ahora si tienes trabajo eres un privilegiado, si eres un mileurista, si te sigues pudiendo tomar una cerveza con los amigos… Curioso como las percepciones cambian y con ello la expectación, lo peor de este austericidio es la perdida de expectativas, la de sentir que no hay mejora posible, que viviremos peor que nuestros padres, que cada día que pasa se nos caen algunos de nuestros sueños, ilusiones, metas, deseos por los que durante todas nuestras vidas luchamos y creímos. Una visión gris que emborrona todo lo que vemos y que nos hace actuar con miedo, desazón, desconfianza, incertidumbre. Hasta ese punto la austeridad está interiorizada en nosotros mismos.

Somos una sociedad que ha hecho del austericidio su propia forma de vida que nos condena a cambiar lo que somos, lo que seremos, hasta a olvidar los queríamos ser.

Foto: Ignaciosanz

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5 comments

  1. davidlife9 dice:

    Muy bueno tu Blog! Me encanta tu forma de escribir!Sigue así.
    Porfavor pasate por mi blog y valora mis poemas y opina sobre ellos.
    Si puedes ayudarme pasandoselo a amigos y seguidores genial.
    Necesito opinion para publicarlos y tener ideas de que debo mejorar o que debe quedar tal cual

    diariodeunpoetanaufragado.wordpress.com
    saludos!

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